Delimitar el tema y propósito de la búsqueda.
Para delimitar el tema es importante definir el enfoque,
profundidad y extensión de la información que deseas trabajar.
El enfoque se
relaciona con la naturaleza de la información requerida, que puede ser de tipo factual, estadística, científica, biográfica,
legislativa, entre otras.
La profundidad y extensión se establecen cuando identificas
las ideas principales y secundarias del tema, esto te permite trazar un mapa de
contenido, tipo y cantidad de información que debes buscar.
Las ideas principales
expresan información básica para el desarrollo del tema principal y los
conceptos que se relacionan directamente sobre él, mientras que las ideas secundarias expresan detalles o
aspectos derivados, con el propósito de ampliar, demostrar o ejemplificar una
idea principal.
El propósito de tu investigación debe ser informativo,
divulgativo o académico.
Una vez que clarificas tu propósito, puedes identificar las
fuentes de información que se ajustan mejor al tema y los propósitos planteados:
libros, ensayos, revistas, páginas de Internet, programas de tv, documentales o
periódicos, entre otros.
