La modificación de la estructura familiar tradicional mexicana
y la creciente participación de las mujeres en las decisiones y en el mercado
laboral son indicadores de los cambios que en poco más de medio siglo ha
sufrido la sociedad mexicana y que explican parte de nuestra dinámica actual.
Familias y hogares con estructuras muy diversas
En México ya no predomina
la estructura familiar nuclear tradicional, la cual apareció en los siglos XVII
y XVIII, si no que convidan familias y hogares con estructuras muy diversas. Si
bien nuestra forma de organización sociopolítica acepta que la familia en es la
cédula fundamental del tejido social, parece que esta se encuentra en un
proceso de cambio histórico. Para el Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática (INEGI) un hogar es el conjunto de personas que pueden
o no ser familiares, las cuales comparten la misma vivienda y un gasto común;
es decir, hasta una persona que vive sola puede constituir un lugar.
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2010, de
carga siento hogares 64 son nucleares, 24 son ampliados, 1 es compuesto (hogar
nuclear o ampliado, más personas sin parentesco con el jefe del lugar), 9 son
unipersonales (hogar conformado por una sola persona y 1 es co-residente
(formado por dos o más personas sin relaciones de parentesco).
Según el Censo de Población y Vivienda 2010 habían 28.1
millones de hogares en México. De ellos, 91%, cerca de 25.5 millones, son
familiares (aquellos donde por lo menos uno de los integrantes de es pariente
del jefe del hogar) y el resto no familiares (donde ninguno de los integrantes
tiene relación de parentesco con el jefe del hogar). Los demógrafos llaman
jefatura del hogar para el reconocimiento de un miembro como jefe o jefa por
los demás miembros derogar, ya sean por su edad, en autoridad o por hacerla
personal que sostiene económicamente el hogar.
Estas cifras confirman que hay cambios en las costumbres,
usos y creencias de la sociedad mexicana en, pues permiten afirmar que más de
la tercera parte de los hogares en el país ya no son nucleares, y parece que en
la tendencia va en aumento, en relación con esto, según los especialistas, en
la sociedad mexicana cada vez existen más hogares sin hijos o conformados por
sólo una persona. Parece que esto es debido un a la modificación de las pautas
de convivencia y A la mayor posibilidad de elegir distintas formas de vida,
pero esto se encuentra relacionado con modificaciones político – jurídicas que
se abordarán más adelante.
Algunos tipos actuales de familia
Nuclear
Se trata de una familia en conformada por madre, padre e
hijos.
Amplia
Formada por parientes cuyas relaciones no son únicamente
paternas o filiales.
Monoparental
Familia donde los hijos viven con un solo padre.
Ensamblada
Familia compuesta de dos o más familias
Homoparental
Aquella donde una pareja de hombres o de mujeres se
convierten en progenitores.
De padres separados
En la que los padres se niegan a vivir juntos pero cumplen
el rol paterno.
La familia mexicana actual según el derecho. Ley de sociedad de
convivencia.
De acuerdo con el Código Civil para el Distrito Federal: “las
relaciones jurídicas familiares generadoras de deberes, derechos y obligaciones
surgiendo entre las personas vinculadas por lazos de matrimonio, parentesco o
concubinato”. Parecería a primera vista de que la ley sancionada solamente como
familia una unión heterosexual, pero en 2007 se debatió fuertemente en esto en
el país con la aparición de la ley de sociedad de convivencia para el Distrito
Federal que reconocía legalmente los hogares formados por personas sin
parentesco consanguíneo o por afinidad, dándoles derecho a heredar, a la
subrogación del arrendamiento, a recibir alimentos en caso de necesidad y a la
tutela legítima.
¿Una familia debe estar formada por una pareja heterosexual?
Si bien la ley sanciona cualquier relación no consanguínea –
una pareja de amigos viviendo juntos durante mucho tiempo, dos personas
solitarias solidarizándose, entre otras -, la discusión en la sociedad civil se
centró en ese momento sobre sí una familia debía estar formada solamente por
una pareja heterosexual y sea una pareja homosexual podía conformar una
familia.
Defensores de la heterosexualidad
Grupos sociales que llevaban formas de vida religiosa se
defendían la heterosexualidad de la familia. Así que la definición de una
sociedad de convivencia como comillas el acto jurídico bilateral que se
constituye, cuando dos personas físicas de diferente el hotel mismo sexo,
mayores de edad y con capacidad jurídica plena, y establecer un lugar común,
con voluntad de permanencia y de ayuda mutua” (Ley de sociedad de convivencia
para el Distrito Federal), les parecía peligroso.
En busca de una definición actual de familia
El derecho mexicano comenzó a modificar la definición de
familia. Así el Código civil del Estado de Coahuila “entiende por familia a las
personas que han estado unidas por matrimonio, pactos civil de solidaridad o
por parentesco con se imprimió, civil o al fin, habitan una misma casa y tienen,
por la ley o voluntariamente, unidad en la administración del hogar”.
¿Decadencia o fin de la familia heterosexual?
Los datos que los especialistas enfatizan para explicar la
modificación de las familias y los hogares en el país muestran que cada vez
menos familias tienen a ambos Padres al frente, y que es más común ver familias
en las que la mujer asume la jefatura. Estos índices muestran que las mujeres
mexicanas adoptar un papel económicamente activo, lo que les permite tomar un
papel que hace un siglo no era posible: tomar decisiones al interior del lugar
y poder determinar la forma de conducir su vida familiar.
Situación laboral de la mujer jefe de familia
Según cifras del INEGI de 2015, de los 48 millones 823 mil
mexicanos ocupados laboralmente 38.4% son mujeres (18 millones 791 mil). Las
que son Madres de uno y hasta más de seis hijos que representan 73% de la
población laboral femenina (13 millones 853 mil). De este número, las que
llevan a cabo la doble condición de trabajar y ser jefas de familia suman
3,832,689. Esto implica que casi cuatro millones de mujeres llevan a cabo en su
vida – lo que las feministas llaman – doble jornada laboral. Por otra parte, en
un documento de 2003 del Instituto Nacional de las Mujeres llamado Perfil de
mujeres y hombres en México, se afirmar que aun cuando se ha incrementado la
participación de las mujeres en las actividades económicas, prevalecen los
roles tradicionales de hombre proveedor y mujer ama de casa.
En este sentido, 30.4% de los hombres sólo realizar trabajo
fuera de la casa y 47.8% de las mujeres dedicada únicamente a labores del
hogar. Lo cual significa que si algo en la dinámica ser modificada por un
fenómeno económico, se mantienen otras inercias por cuestiones sociales o
culturales.