Augusto Comte (1798-1857) fue un filósofo considerado como
el creador del positivismo y la sociología. Contemporáneo de Darwin, Comte
consideraba que la razón y la ciencia deberían ser las únicas guías de la
humanidad para instaurar el orden social y no las corrientes teológicas o
metafísicas.
En su obra Curso de
filosofía positiva, publicada en 1842, Comte afirma que la sociedad pasa
por tres estados diferentes para comprender su naturaleza y su origen:
• Estado
teológico o ficticio. En el politeísmo, el ser humano buscaba explicaciones
mediante deidades, a las cuales les atribuía capacidades de control de todos
los fenómenos naturales. En el monoteísmo predomina la creencia en un solo
Dios.
• Estado
metafísico o abstracto. Para muchos, la idea de Dios era abstracta, no
había una idea clara de qué era, pero sí de sus capacidades. No existen deidades,
y se busca el porqué de las cosas. Estas deidades son sustituidas por ideas abstractas
de entidades, como la Naturaleza.
• Estado
científico o positivo. Era el real, el definitivo, dominado por la mente
racional. En este estado, el ser humano busca hechos y aplica las leyes
naturales.